Algunos consumidores necesitan baterías rentables para alimentar su flota de carritos de golf. Otros clientes pueden necesitar una batería avanzada de alta potencia que les brinde la mejor autonomía y una carga rápida para sus vehículos eléctricos. Con tantos tipos y funciones de vehículos diferentes, tiene sentido que haya muchas baterías para elegir para cada uno.

Pero, ¿qué baterías funcionarán mejor para los vehículos de sus clientes? Todo depende del tipo de vehículo que tengan y de lo que requieran que haga. No todas las baterías son iguales, y saber qué batería funciona  mejor para determinados vehículos  puede marcar una gran diferencia en rendimiento y longevidad. 

En este artículo, desglosaremos algunos de los tipos de baterías más comunes, sus usos y algunos pros y contras para ayudarle a encontrar la batería adecuada para cualquier aplicación.

Por qué los vehículos requieren diferentes tipos de baterías

Las baterías están diseñadas de manera diferente para satisfacer diversas necesidades de rendimiento. Algunas baterías necesitan tener una profundidad de descarga menor para soportar mejor  las funciones de parada y arranque en los automóviles , una función popular en los vehículos modernos por sus beneficios de economía de combustible. Otras baterías necesitan funcionar en   entornos marinos y recreativos .

No puedes poner la misma batería de 9 V que usas para tu detector de humo en el control remoto de tu televisor, y el mismo sentimiento se aplica a los vehículos. Si bien algunos vehículos pueden aceptar diferentes tipos de baterías, no todas las baterías son intercambiables. 

Supongamos que su cliente cambia a un vehículo híbrido enchufable o eléctrico, que requerirá mucha más energía que una batería estándar diseñada para un automóvil de gasolina. En ese caso, su cliente necesitará una batería potente diseñada para hacer algo más que arrancar el motor, como una batería de iones de litio, para mantener en funcionamiento todos los sistemas eléctricos y computarizados.